A new hope

Alrededor de dos millones de personas presenciaron en directo el acto de toma de posesión del nuevo Presidente de los Estados Unidos de América.

Hubiese querido ser parte de ese instante. Ardía de ganas de estar más cerca que de lo que pudo otorgarme la TVC en pocos segundos de retransmisión del acto. Ni las fotografías que consulté en ciertos sitios de prensa pudieron calmar mi ansiedad.

Lo cierto es que el esperado 20 de enero transcurrió aquí como un día cualquiera. A mi alrededor apenas se hablaba del nuevo Presidente del Imperio que rige prácticamente el acontecer internacional.

Aunque ayer tuve un examen en la Universidad, estuve al tanto del momento que pocos intelectuales dejarían de considerar como histórico. Y no dudo que la nueva etapa en que estamos inmersos a partir de entonces llegue a obtener el mismo calificativo.

Al señor Barack Obama le debo mi más grande respeto por haber rescatado la esperanza. No sólo una, sino varias, de diferentes categorías, en el sentir de millones de personas de todas las regiones del mundo.

De la mía en particular soy capaz de referirme, aunque superficialmente; quizás por miedo a equivocarme, o por dejar bien claro que desde hace mucho tiempo perdí la que alguna vez tuve en el "proceso revolucionario" que me rodea.

Hoy les comunico a todos ustedes que los retos a los que nos enfrentamos son reales. Son graves y numerosos. No podrán superarse fácilmente, ni en un corto periodo de tiempo. Pero, Estados Unidos de América, quiero que sepan algo: esos retos van a ser superados.

Aunque dirigida a sus ciudadanos, estoy convencido que el Presidente de EE.UU. quiso transmistirla al resto de la Orbe. Pues se trata de desafíos que afectan tanto a su Imperio como al resto de las naciones.

Espero que el Sr. Barack Obama continúe demostrando sus habilidades, su perspicacia e inteligencia; que no se deje atrapar por los círculos de poder a los que se ha enfrentado públicamente desde el proceso electoral; que mantenga su promesa con el medio ambiente y con el adecuado uso de las tecnologías; que aprenda y enseñe a los norteamericanos a respetar la soberanía del resto de las naciones del mundo, y considere los beneficios de la amistad con América Latina y el Medio Oriente.

Esas son, básicamente, mis esperanzas respecto a lo que pueda lograr una persona con cultura y raíces tan heterogéneas, que ha sabido impulsarse desde tan lejos hacia la cúspide, con la honestidad que hasta ahora demuestra.

Es difícil mantener la cordura cuando se llega tan alto. Los retos actuales afectan la salud de las decisiones. Y Obama parece saber a lo que se enfrenta.

Ojalá los mecanismos actuales permitieran a los interesados -y bien intencionados- contribuir de un modo eficiente con sus objetivos. Desde el sitio web de su nuevo hogar nos deja brindar opiniones y consultar cada decisión de su Gobierno con mucha más transparencia de lo que históricamente nos han acostumbrado.

Queda esperar, entre otras cosas, que Barack Obama contribuya a que el término democracia sea algo indiferente para las nuevas generaciones. El futuro de la humanidad no merece menos que eso.

3 notas:

Francisco Castelo Branco dijo...

HI

I saw your blog and i think is interesting

I have a blog also
I would like a opinion.....

the adress is www.olhardireito.blogspot.com


the blog have a translate google tool

te gustaria d hacer un texto sobre la Cuba del Fidel para mi blog??

Se si, me envia un mail para hablarmos

saludos

Anónimo dijo...

Muy bueno este articulo. Me resulto interesante pues es la perspectiva de alguien que esta dentro de Cuba. No sabia que en la Tv cubana habian puesto fragmentos de la inauguracion. Realmente fue un momento impresionante, practicamente todo el planeta estaba viendo, ya que los retos que Obama enfrenta son globales y sus decisiones afectaran, ojala que para bien, a todos.

Alejandro Cuba Ruiz dijo...

La Televisión Cubana muestra fragmentos de algunas de las noticias inevitables. Las de interés para la política del Estado son extensamente cubiertas por nuestros medios, e incluso retransmitidas en más de una ocasión.

Una de las cosas que espero de un posible cambio derivado de la distensión de las absurdas restricciones norteamericanas a nuestro pueblo, es un incremento notable de la libertad de acción y expresión. Ojalá esté en lo cierto mi esperanza.