Disimulando agüeros

Les encanta asegurar que el conocimiento del futuro sólo es posible cuando la información involucrada no impida ese futuro.

Pero si le damos dos o tres vueltas al asunto, podríamos retorcer hasta el punto crítico los acontecimientos.

Con cuidado, pues más allá del umbral la profecía se torna ambigua. Y justo por debajo de la incertidumbre está el tensor de las Parcas, remendando el porvenir para que nadie se las dé de clarividente o de agorero.