Hay evidencia de que nuestros cerebros están siendo recableados por Internet, porque recibimos una pequeña dosis de dopamina cada vez que chequeamos nuestro email, Twitter o Facebook y hay alguna actualización.
Estamos desarrollando un poco de TDAH, lo que probablemente no sea muy bueno en términos de ser productivos.
Webcohólicos anónimos:
![](http://img1.blogblog.com/img/icon_feed12.png)
0 notas:
Publicar un comentario